Hasta hace unos años, la escolarización obligatoria en Uruguay comenzaba a los 6 años de edad. Hoy en día, los niños entre 3 y 4 años deben asistir a centros de educación inicial con la finalidad de desarrollar sus habilidades motrices, cognitivas, emocionales y sociales. Este cambio puede responder a la tendencia, ya instalada desde hace tiempo, de que los padres prefieren llevar a sus hijos al “jardín” en vez de dejarlos en casa al cuidado de empleadas, familiares o de ellos mismos.
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La oferta de colegios a nivel “maternal” (de 0 a 2 años) ha aumentado en los últimos años. Los padres eligen esta opción pensando en que sus hijos estarán en un lugar seguro, con personal especializado que los estimula en su desarrollo, les enseña a socializar con otros niños y a interactuar con otros adultos que no son sus familiares. En el nivel 2 y 3 años, el jardín ayuda a los niños –y a los padres- a dejar los pañales, la mamadera, el chupete, a comer solito usando cubiertos, entre otros, logrando una mayor autonomía.
Pero, ¿qué pasa cuando la escolarización comienza a ser obligatoria y se le exige al niño que alcance determinados estándares de desarrollo según su edad? ¿Realmente funciona esta previa estimulación para que el niño cumpla con las exigencias de esta etapa? También me pregunto, ¿Es realmente adecuado enseñarle a escribir a partir de los 4 años? Y, ¿Verdaderamente le servirá para su futuro aprender 1 o 2 idiomas diferentes al español desde los 3 años de edad?
En lo personal, si bien acompaño, de cierta forma, esta tendencia de preparar a los niños desde chiquitos para que desarrollen todas sus potencialidades, pienso que quizás, nos estamos olvidando de lo que nuestros hijos más necesitan en esta etapa: la mirada atenta y dispuesta de mamá y papá, jugar libremente sin tiempos marcados ni influencias, disfrutar sus 4 o 5 años de edad sin preocuparnos ni preocuparlos sobre lo que pasará dentro de 15 años y fundamentalmente, dejarlos ser ellos mismos.
Con esto no estoy diciendo que estoy en desacuerdo con la educación inicial o la escolarización obligatoria desde temprana edad, sino que, pongo en cuestión la opción que tomamos algunos padres de llevar 8 horas al colegio a nuestro hijos entre 3 y 5 años para que aprendan inglés, italiano, español, música, informática, deportes, etc., etc. con la intención de asegurarles un futuro exitoso.