Violencia femenina

Ayer, jueves 25 de noviembre, se celebró El Día Mundial de la No Violencia Hacia la Mujer. Como representantes del género, debemos estar orgullosas de este tipo de iniciativas, pero ¿qué pasa cuando son las mujeres las que maltratan?

Les contamos de “Mujeres por la ciudad”, una apuesta para erradicar la violencia de género en las ciudades, como ésta, existen otras instancias que buscan protegernos de los abusos que se comenten contra nosotras: maltrato físico y psicológico, trata de personas, violaciones, condiciones terribles para vivir, desigualdad de derechos (salarios, puestos de trabajo, etc.)…

Otra iniciativa que tiene alto impacto en la sociedad es la que realizan Vital Voice, una organización sin fines de lucro que trabaja por el liderazgo femenino, combate tráficode personas y las demás formas de violencia hacia mujeres y niñas. Son todas instancias que nos permiten surgir como mujeres y al mismo tiempo como sociedad, pero ¿qué sucede cuando son las mujeres las que pegan? ¿Tenemos que aceptarlo solo porque son féminas también?

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La verdad es que ningún tipo de violencia de género está aceptada, ni contra mujeres ni contra hombres, por eso debemos combatir y erradicar ambas, no solo la que se comete contra nosotras. Porque no hay violencia de ellos o de nosotras, la violencia siempre es violencia y por lo tanto es mala.

A veces la violencia de nosotras contra ellos es en “menor grado”, una simple cachetada, dicen algunos, ¿quién no lo ha hecho? Mentira, ¿tenemos que aceptarlo solo porque lo vemos en la TV? Por eso, por la”simple cachetada”, es que la violencia femenina es un poco más “aceptada” que la que ellos comenten contra las mujeres y por lo mismo es que está más justificada por la sociedad: “es que está con la menopausia”, “le llegó la regla, por eso reacciona así”, “está triste”, “él se lo merecía” o “me encantaría pegarle una cachetada a alguien alguna vez”.

Pero lo cierto es que no deberíamos celebrar algo así. ¿Por qué pega una mujer? Porque entra en el juego del poder, quien lo tiene es quien abusa. ¿Qué hacer? Desaprender ese tipo de conducta, porque tenemos que reconocer que la violencia es un asunto aprendido. Si ellos no nos pegaran o si nuestras madres no hubieran golpeado, nosotras no tendríamos por qué levantarle la mano a nadie.

Para lograrlo de mejor manera es que existen instituciones que buscan promover el diálogo entre las personas para que alcancemos una sociedad más justa, tolerante y sin violencia.