¡Feliz Navidad!

Todavía no quiero pensar en lo bueno y en lo malo del año que se va. Falta una semana para que se acabe el 2010 y aún puede resucitar Gustavo Cerati o aparecer un nuevo documento de Wikileaks, que nos diga algo más revelador que chismes políticos, algo que nunca más nos haga ver la vida de la misma manera y nos convierta en nuevos espectadores de nuestro destino (no estamos solos, la Nasa ya se ha juntado a tomar café con un ET!).

Dejemos los rewind y fastforward anuales para los matinales y quedémonos exactamente donde estamos, acá y ahora, online: en vísperas de la Navidad.

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Siempre uno le desea Feliz Navidad más a alguien que a otro. Yo también tengo mi lista.

Feliz Navidad

A mi hijo AJ por haber sido angelito por un día.

Mi hijo NA por pertenecer a una nueva especie terrestre: los niños cristales (que brillan solos, sin chuparle energía a los otros).

A las profesoras de su jardín infantil Waldorff Valparaíso, por enseñar algo que muchos jardines ignoran: a ser niño.

Mis lectoras (es), por escuchar las aventuras y desaventuras de mi maternidad.

A Belelú y sus editores, por crear una comunidad femenina y feminista, como pocas hay en Chile.

A quienes fueron madres este año, a quienes todavía no pueden serlo, a las que lo serán con problemas y sufrimiento como Claudia Pizarro, quien no tiene el derecho de hacerse un aborto terapéutico.

A las madres, padres, amigos, pololas, ex pololas, de todos esos chicos que murieron en la Cárcel de San Miguel, recordándonos que no hay peor hoguera para un país que la de sus propias vanidades.

A Ximena Ossandón porque su Navidad debe ser el mejor piloto jamás filmado de La Novicia Rebelde (¿puedo ir?)

A Rachel Maddow, por reinar en el periodismo políticamente incorrecto.

A todas las chicas que sufren bullyng en sus colegios.

A las parejas gays y lesbianas que hacen familia a punta de amor.

A Michelle Bachelet por sacar la cara por todas mujeres del mundo desde la ONU.

A nuestra ídola pop, estrella absoluta, Javiera Mena y su gran disco Mena, lejos el mejor regalo para bailar entre chicas esta Navidad.

Al rapero Odd Future y su derecho a decir Fuck Christmas.