Moda y Belleza

Maquillaje primaveral

Uno de los productos fundamentales a la hora de maquillar es el rubor, blush o colorete, muchas veces mal usado o desestimado. Su uso muchas veces o se omite, o es excesivo. Hay que tener claro que no es un producto para perfilar el rostro (para eso hay otros productos) sino para dar luz y color a nuestras mejillas, dando ese toque candido y fresco que entregan las sonrisas sonrojadas.

Acá algunos tips para que no cometas errores.

El rubor debe aplicarse en la “manzanita” es decir en la parte más alta de las mejillas. La manera más fácil de hacerlo es sonreír y aplicar el producto justo en la parte más alta y abultada del pómulo.

Recomendados

Existen diferentes texturas:

Polvo: la mas común y de más fácil aplicación, con un pincel de pelo (redondo o perfilado), proporcional a tu rostro, aplicas en la manzanita, en movimientos redondeados y luego como péndulo, dirigiéndose hacia la oreja, pero no llegando a ella, es mejor que apliques poca cantidad de producto y sumes poco a poco, para no quedar igualita a Jem, recuerda que es un toque, no deberías parecer saliendo del gimnasio.

Para controlar la cantidad de producto te recomiendo sacudir el pincel una vez para eliminar el exceso. Ideal para todo tipo de pieles, especialmente las grasas.

Crema: es ideal para las pieles secas, se aplica con esponja o con los dedos, de manera suave difuminamos ya que queda espantoso si queda manchado, hay en el mercado varios productos multiusos que aparte de servir de rubor se usan para los labios y ojos, ideal para llevar en la cartera.

Gel: es el más traslucido de los tipos, es muy natural y duradero, se aplica con dedos o esponja

A la hora de elegir los colores hay que tener en cuenta el tono de tu piel:
Piel morenas: Tonos rosa oscuro, coral, rojo quemado y bronce.
Piel dorada: Tonos tostados, cobrizos y naranjas
Pieles claras: Tonos ciruelo, vino, carmesí, rosa, pasteles, melón y durazno

Es fundamental que al comprar tu blush, lo hagas a la luz del día, para ver bien los colores y siempre probarlo en tu piel, pues es diferente verlo en el empaque que como funciona con tu piel.

Como regla general el rubor se aplica después de maquillar los ojos y antes de los labios, para lograr un adecuado equilibrio entre las partes, ya que es un error común que quede demasiado cargado.

Si tu rostro es cuadrado o mas relleno, fíjate de que el rubor no sobrepase el cuadro del ojo, pues de ser así podría verse mas ancho.

Tags

Lo Último


Te recomendamos