Actualidad

Cuando tienes la esperanza de hacer cambiar al tipo que te hace sufrir

Te digo desde ya que no pierdas tu tiempo.

Si hay algo que he descubierto en mi poca experiencia de tener parejas, es que la gente no cambia. Hace un tiempo les hablaba que al final hay que conformarse con lo que tiene, pese a que tenga algunos defectos, ya que nada es perfecto y la base es la tolerancia.

Sin embargo, hay veces en que hay que reconocer cuando estás frente a un real imbécil que no te merece. Ese típico hombre que no te respeta, que te hace sufrir y que al final termina por autoconvencerte que solo tú podrás cambiarlo.

Muchas veces elegimos a personas totalmente inconvenientes, con quienes comenzamos un desafío: Cambiarlos. Con eso buscamos que sean otros y lograr que, por ejemplo, un mujeriego se vuelva fiel, un agresivo se transforme en el más cariñoso o que un inmaduro, crezca de un día para otro.

Recomendados

Si eres de las que está en esa cruzada, como para querer demostrar o demostrarte algo a ti, mejor déjalo. Personalmente yo me las di de súper mujer y quise cambiar al típico mino frío, mujeriego y rudo, por un hombre amable, cariñoso y fiel. Quería que fuera solo para mí, y dejar en claro que su giro en 180 grados había sido mi obra. Resultado: nada pasó. El tipo continuó siendo un imbécil y yo lo pasé pésimo.

Deja esa esperanza de lado y no pierdas tu tiempo. Hace unos años descubrí que una de las cosas más valiosas en la vida, es el tiempo y no hay que gastarlo en estupideces.

No aguantes ni pretendas cambiar a un tipo que te hace sufrir. Búscate a otro.

Y tú, ¿has tenido la esperanza de ser la causante de un cambio?

Tags

Lo Último


Te recomendamos