Conoce a la única latina en ingresar al Salón de la Fama

Sin duda hay mujeres que son un orgullo para el género y siembran las bases para despertar en el resto de las mujeres el hambre por la igualdad y la defensa de los derechos.

Ella es Dolores Huerta, una mujer que como defensora de los derechos de los trabajadores del campo,  ha sido arrestada veintidós veces por participar en actividades de desobediencia civil no violentas y huelgas, su coraje la llevó a ser la cofundador del más grande sindicato campesino en Estados Unidos y fue la única latina en ser incluida en el salón de la Fama de California en este 2013.

Actualmente tiene 82 años, es hija de padres mexicanos, nació en Nuevo México y trabajó desde muy niña en los campos agrícolas de California.  Su madre era una mujer de negocios y propietaria de un restaurante y un hotel de setenta habitaciones en el que solía brindar hospedaje a familias campesinas sin cobrarles, ahí Dolores comenzó a  estar consciente de la situación que viven los campesinos en Estados Unidos y decidió no quedarse con los brazos cruzados.

Recomendados

¿Cómo explotar tu sensualidad si eres mamá o estás metida en el arquetipo de la madre?

¿Por qué la Generación Z es menos feliz al resto? Nuevo estudio muestra una preocupante situación

Un evento solidario que promueve la vida saludable y apoya la lucha contra las adicciones

Hoy ya lleva cinco décadas en la lucha por los derechos sindicales de los campesinos, en 1962 fundó la Asociación Nacional de Trabajadores del Campo que más tarde se transformó en el Sindicado de Trabajadores Agrícolas.

Aún se le recuerda por haber dirigido el boicot nacional contra la uva, que hizo a la población sentir el sufrimiento por la escasez de este producto  y la lucha de los trabajadores del campo. El boicot se extendió por toda la industria de la uva de California y propició la firma un acuerdo colectivo. Dolores ha visto como sus la dimensión de sus acciones se ven reflejadas en la sociedad.

Por eso un reconocimiento en el Salón de la Fama de California es sólo una cereza en el pastel, parte del reconocimiento que una mujer como ella merece. La vimos desfilar al lado de Gregory Bateson, el actor y director Warren Beatty, los diseñadores Charles y Ray Eames, el retirado jugador de fútbol Joe Montana y los fallecidos hermanos Warner y mientras la veíamos pasar las mujeres sabíamos que iba en representación de todo el género.

Los galardonados recibieron la medalla Espíritu de California por su labor de innovación de manos del gobernador Brown en una ceremonia que se efectuó en Sacramento en el Museo de California.

Y digo que este reconocimiento es sólo la cereza en el paste porque el año pasado Huerta recibió la Medalla de la Libertad por el presidente Barack Obama que le reconoció su contribución ejemplar en sus actividades en este país y en 1998 el presidente William Clinton la distinguió con el premio Eleanor Roosevelt de los Derechos Humanos.

Huerta ha dedicado toda su vida a las causas de la justicia social, los derechos de las mujeres, las minorías, los inmigrantes y los derechos humanos, sin duda lo trae en la sangre,  leer la sobre la vida de una activista como Dolores sólo nos deja como sabor de boca…y si ella puede ¿por qué nosotras no?