Aprende a meditar para vencer el insomnio

Después de horas de no poder conciliar el sueño, recordé una antigua clase de “Biodanza” que tomé el año pasado como método alternativo a mis pastillas para dormir de esa época. En Belelù ya hemos hablado de métodos naturales para lograr dormir. La biodanza es el arte de utilizar los sentimientos que surgen del baile libre para lograr un auto conocimiento.

Al comienzo del taller comentaron métodos para lograr una meditación eficaz y rápida al momento de acostarse para los que sufrimos de insomnio, nunca lo había practicado porque sentía que la meditación era para mentes capaces de callar las voces mentales y mi mente es lo más trabajólica que hay.

Lo intenté una noche y al cabo de media hora sentí tanta paz en mis pensamientos que logré dormir.

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Les dejo algunos consejos para que puedan poner en práctica en su casa, ya sea en la cama o algún otro lugar dónde te sientas cómodo y no debas moverte para acomodarte:

1-. Una de las técnicas más eficaces es utilizar música de fondo, ponte tus audífonos y escoge una canción tranquila, ojalá sin letra y de larga duración (no sabemos cuánto llevará desconectarse).

2-. Comprime todos tus músculos y luego relájalos uno por uno, desde las extremidades hasta el estómago o de pies a cabeza.

3-. Comienza a contar desde 10, imaginando que subes (o bajas) una escalera, por cada número un peldaño.

4-. Al llegar al final de tu camino imagínate en el lugar más agradable que puedas imaginar e intenta afinar el oído en tu memoria para construir el escenario, cada sonido ambiental.

5-. Estando ahí tienes dos opciones: desconectar tu mente o (si tienes algún problema) repetir lo fácil que es solucionarlo y que puedes lograrlo.

6-. Al terminar vuelve a tu punto inicial por la escalera y lentamente abre los ojos.

Cada día será más fácil lograr la concentración, en mi caso, luego de cinco días comencé a conectarme más rápido con mi lugar y realmente todos los problemas y malas experiencias que estaba atravesando se aligeraron, me sentí aliviada y querida conmigo misma.

Es bueno quererte, darte éstos ratos de paz y así cuidar de tu alma, sobre todo cuando no encuentras paz ni concilio ¡Inténtalo!