¿No sabes dónde depositar todas esas cosas que compraste e intercambiaste con tu ex? Es típico que cuando terminan las relaciones nuestro bote de basura termina llenísimo, tiramos hasta el más mínimo detalle que nos recuerde a ese hombre. ¿Pero qué tal te sonaría la idea que hubiera un lugar donde se depositen todos estos objetos?
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Pues ¡voila! ¡existe! tienes que conocer el Museum of Broken the Relationships o mejor conocido como El Museo de los Corazones Rotos. La idea surgió cuando después de una relación de cuatro años Olinka Vištica y Dražen Grubišić no conforme con separarse y olvidarse el uno del otro, sentían que les faltaba un cierre, algo que sellara con broche de “oro” la historia.
Olinka asegura “estábamos viendo qué hacer con las cosas en común, y eso es fácil cuando hablas de la tele o los libros, pero ¿qué haces con las pequeñas cosas que se compraron con la mediación del amor? Entonces pensamos que sería bonito que existiera un lugar donde poder dejarlas. Hay rituales para cuando alguien nace, se casa o termina el colegio, y conservamos recuerdos de todos, pero no hay recuerdos de una separación, así que pensamos en crear ese espacio en el que tuviera lugar ese ritual”.
Uno de los objetivos del museo es cambiar la imagen de la ruptura como algo muy negativo, “pasas años con una persona y eres feliz y luego te separas; sin duda hay recuerdos dolorosos, pero pasado un tiempo hay que hacer algo por conservar la memoria de aquello que fue bueno”, dice Grubišić.
En 2006 la pareja puso su primera exposición que contenía estos objetos, y debido a su éxito se convirtió en una muestra itinerante donde las parejas que iban pasando podían regresar a dejar esos objetos que marcaron su relación.Los objetos que se van sumando son la base de este pequeño museo que está ubicado en Zagreb, en la parte alta de la ciudad, en la misma calle donde tienen lugar la mayoría de las bodas de la capital de Croacia, junto al Ayuntamiento y a la iglesia de San Marcos, la preferida para casarse ¿qué paradoja, no crees?
La idea ha resultado todo un éxito y este museo croata fue distinguido como el museo más innovador de 2011 por la European Museum Forum.
Parte de la colección sirve para crear exposiciones que ya han estado en Houston, Colorado, Buenos Aires, Londres y Brasil. Gracias a esta internacionalización “se ven las diferencias sociales y culturales de un lugar y de otro. Además, la gente escribe sus propios textos. No los editamos, tal cual nos llegan se exponen”, asegura Grubišić.
¿Te atreverías a depositar tu historia en este innovador museo croata? Sólo será cosa de llenar un sencillo formulario.
Fuente: Culturacolectiva