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Volver a leer chats y mails antiguos

Revisar nuestro historial de chats y correos electrónicos es prácticamente como si nos subiéramos a una máquina del tiempo para viajar al pasado y reencontrarnos con nosotras mismas.

Hace 2 meses regresé a vivir a la ciudad de Monterrey (donde nací) después de estar 4 años lejos de aquí. Como era de esperarse, apenas me estoy adaptando de nuevo al ritmo de esta gran ciudad, al trabajo, los planes y poniéndome al corriente con todo lo que ha pasado alrededor de mi familia y amigos.

Desde que anuncié mi regreso, he recibido mensajes de muchas personas queridas a través de Facebook y es curioso cómo en esta red social se guardan las conversaciones, pues al volver a chatear con algunas de ellas, pude ver que nuestro último mensaje lo hicimos en el año en que me fui y al reanudar los mensajes en el inbox, resultó prácticamente como si esos 4 años se hubieran congelado.

Por curiosidad entré a ver casi todas mis conversaciones y fue como viajar al pasado en cuestión de segundos. Reviví increíbles y amargos momentos, me reencontré con una chica (yo) distinta en experiencia, historia, formas de expresarse; pero igual en esencia.

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Hice lo mismo revisando el correo electrónico y fue emocionante volver a leer ese mail que envié con el que obtuve mi primer trabajo, ya que de no haberme atrevido a escribirlo, no estaría aquí compartiendo esto para ustedes. Otros ejercicios que podrían funcionar son revisar carpetas a las que hace mucho tiempo no les hacemos caso, fotografías escondidas en algún rincón de nuestros respaldos personales, volver a leer posts antiguos en caso de tener un blog, etc.

Lo que sentí no puedo expresarlo con todas las palabras que quisiera, pero quizá podría resumirlo en una sola: nostalgia. Me di cuenta que si bien, algunas cosas me hicieron llorar, esas equivocaciones me hicieron crecer y aprender. Lo increíble fue que después de volver a leer todo eso, hoy puedo sonreír.

Yo les recomiendo que en un tiempo libre lo hagan y reflexionen un poco sobre lo que ha pasado con ustedes, ¿cómo son ahora?, ¿qué ha cambiado en ustedes?, ¿qué quisieran volver a vivir?, ¿con quién les gustaría reanudar una relación?

Viajar al pasado y sorprenderte al final con una sonrisa, es una satisfacción enorme; y si resultara lo contrario, entonces algo debe cambiar ¿no creen?. Es parte del experimento y por eso, vale totalmente la pena intentarlo.

 

Foto: Hugo y Charli en Flickr

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