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Mujeres reclaman sus cuerpos en Registro de la Propiedad

La protesta se propone dejar claro que el cuerpo de las mujeres no pertenece a la Iglesia ni al Estado.

Ayer, en Pamplona, España, un grupo de mujeres asistió al Registro de la Propiedad con una exigencia básica: dejar claro que sus cuerpos les pertenecen a ellas y no al Estado, ni a la Iglesia ni a ningún partido político. Es decir, exigir los derechos sexuales y reproductivos que les corresponden.

El objetivo de la protesta, organizada por la artista Yolanda Domínguez y otras integrantes de un grupo feminista de Navarra, quedó expresa en un comunicado:

El cuerpo de las mujeres no pertenece a ningún órgano eclesiástico ni partido político, pues la capacidad de decisión recae única y exclusivamente sobre nosotras mismas, las mujeres.

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Esta acción relacionada con el derecho al aborto se repitió en otras ciudades españolas, en donde grupos de mujeres acudieron a los registros a reclamar “la posesión y libre uso” de sus cuerpos, “reconquistando el poder sobre ellos” y haciendo constar que nadie sino ellas mismas podrá tomar decisiones al respecto.

En días pasados, miles de personas protestaron en las principales capitales europeas contra la reforma de la ley del aborto en España, que pretende limitar este derecho a los casos de violación y riesgo de salud para madre.

Ante esta posible reforma, Yolanda Domínguez y sus compañeras mencionan que no se van a resignar y que continuarán movilizándose para manifestar su indignación y rechazo hacia “un anteproyecto de ley retrógrado y machista, hasta su retirada”.

La marea violeta sigue y seguirá estando viva mientras el Partido Popular siga defendiendo la austeridad, el control y la sumisión que a través de este anteproyecto pretenden implantar en las mujeres.

La medida es curiosa. Obviamente no se refiere a registrar legalmente el cuerpo como una propiedad, sino a llamar la atención de partidos políticos y legisladores. Es como jugar el juego que ellos plantean (papeleo, escrituras, trámites): “nuestro cuerpo está registrado a nuestro nombre, no puedes decidir sobre él”.

La reforma de la ley del aborto en España representaría un retroceso. Lo que resulta lógico y elemental para muchos de nosotros, es todavía inaceptable para algunos sectores de la sociedad.

Fuente: Noticias de Navarra

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