¿Qué es lo primero que haces cuando quieres saber algo? A excepción de aquellos que todavía tienen la buena costumbre de acudir a los libros, la mayoría de nosotros usaríamos el método más fácil e instantáneo: Google.
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Lo tenemos casi internalizado; es una opción rápida, que no requiere de mucha imaginación o creatividad. Es este último punto el que justamente está en peligro de extinción: cada vez estamos menos creativos, ¿no lo creen?
Quizás haya opiniones divididas en este sentido, sin embargo, hay estudios que comprueban que los buscadores en Internet pueden afectar nuestra capacidad para pensar en nuevas ideas o conceptos.
Una investigación publicada en Journal of Marketing Research afirma que, con el tiempo y la tecnología, hemos comenzado a perder la capacidad de resolver problemas por nuestra cuenta, sin apoyo de Internet.
El estudio se hizo a partir de un ejercicio de creatividad: un grupo de niños y adultos debieron construir determinadas figuras o diseños con LEGOs. Algunos tenían instrucciones claras y otros, debían usar su imaginación para lograr la tarea.
Los adultos o niños que habían tenido buen desempeño en las tareas con indicaciones específicas, habían fallado en las que debían usar su creatividad. Esto quiere decir que seguimos un patrón que conocemos y tratamos de implementarlo mientras sea posible.
Según los investigadores, esto tiene una relación directa con los buscadores de Internet. Si tenemos un problema y acudimos a Google para solucionarlo, lo más probable es que en una próxima ocasión, hagamos lo mismo y no usemos la creatividad.