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El quiosco, 02/06/10

Israel, la tormenta Agatha, Gustavo Cerati y el amor entre Lyz Taylor y Richard Burton en El Quiosco.

-El mundo sigue tenso por el ataque del Ejército de Israel a la Flotilla de la Libertad, los barcos que llevaban ayuda humanitaria a la Franja de Gaza. También continúan los estragos en Centroamérica provocados por la tormenta Agatha. Pero no todo es tragedia esta mañana en el Quiosco de Belelú: Gustavo Cerati está evolucionando y ya respira por sus propios medios. Sabías que Elizabeth Taylor y Richard Burton tuvieron un amor tomentoso.

La noticia del día (y de la semana) es lo que está sucediendo en Israel. Emol.com anuncia esta mañana que la chilena que formaba parte de la flota de la ONG ya fue liberada y espera su deportación. Kimberly Soto Aguayo será traslada a Suecia, donde reside, en los aviones que dispuso Turquía (son seis naves). Todas las personas que estaban detenidas en la cárcel de Elá (en Beer Sheba), fueron enviados al aeropuerto internacional de Israel en Tel Aviv. Lo mismo pasó con los tres españoles detenidos, informa El País. Ver artículo.

Estos activistas tomarán un avión hacia Estambul desde el aeropuerto de Ben Gurion, 45 personas fueron deportadas desde ese aeropuerto después de firmar un documento de repatriación voluntaria. 50 pasajeron aceptaron de inmediato la deportación cuando fueron interrogados en Ashdod. Los reproches al ataque del lunes siguen, por supuesto. El Delegado General de Palestina en España, Musa Amer Odeh, calificó el asunto de “secuestro y piratería en aguas internacionales. Ha sido una acción asesina”. Ver artículo.

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Guatemala pide apoyo internacional tras 156 muertos por Agatha, dice La Tercera en su edición de hoy. La tormenta tropical que ha atacado Guatemala, Honduras y El Salvador, ha causados pérdidas terrible y un enorme agujero de 20 metros de diámetro y 60 de profundidad (ya publicado en muchos medios) en una zona residencial de Guatemala. Ayer iban 135 muertos y miles de damnificados, hoy el número subió a 156 fallecidos y 105 desaparecidos, sólo en Guatemala, por eso el gobierno de ese país está pidiendo ayuda al resto del mundo. Estados Unidos donará dos millones de dólares para reparar en algo el daño: 6.989 viviendas destruidas total o parcialmente, 491 escuelas con daños severos, 19 centros de salud y 14 puentes destruidos. Hay 128.000 afectados, 125.000 debieron ser evacuados y 42.000 están damnificados o perdieron sus cultivos. Ver artículo.

Cerati (50) está evolucionando, dice el Clarín hoy. Qué bueno, ahora el músico argentino puede respirar por sus propios medios y presenta una “leve mejoría”, dice el parte médico entregado por el Centro Médico de la Trinidad en Caracas donde está internado desde el 15 de mayo por el accidente cerebro vascular que sufrió. Igual no es seguro todavía que lo trasladen a Buenos Aires y sigue en la sala de terapia intensiva. Ver artículo.

Un amor tormentoso, sí, pero un amor verdadero, así califica El Mundo la relación que tenían Lyz Taylor (78) y su dos veces marido, Richard Burton. Podrás enterarte de lo que sentían estos actores el 15 de junio cuando publiquen (en Estados Unidos) el libro Furious Love: Elizabeth Taylor, Richard Burton, and the marriage of the century (Amor furioso: Elizabeth Taylor, Richard Burton y el amor del siglo). El texto se escribió gracias a la donación que la actriz de ojos violeta hizo de su correspondencia. El amor surgió en la película ¿Quién teme a Virginia Wolf?, pero recién comenzaron el romance mientras filmaban Cleopatra (1962) en Roma.

El problema que ambos tenían en ese momento, es que estaban casados y hasta el Vaticano los criticó por lo que hacían. Se casaron en 1964 y se separaron en 1974, pero no aguantaron mucho el estar lejos y 16 meses después, en 1975, volvieron a unirse, pero esta vez la boda duró sólo hasta julio del ’76. La carta que más atesora Lyz es la que Chichard le envió desde Suiza (donde murió) poco antes de fallecer en 1984. Richard se casó cinco veces, tuvo tres hijos y nunca estuvo seguro de su condición sexual (“homosexual, heterosexual, bisexual o qué diablos”) y se le insinuaba a cada actriz que trabajó con él. Ver artículo.

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