La regla se siente mal, sí. Pero la menstruación no es mala, ni sucia ni vergonzosa, no debería despertar culpa o asco atravesar por una función biológica del cuerpo femenino.
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El tema se ha abordado desde diferentes perspectivas: la del poder, la de la religión y el de feministas que denuncian una percepción generalizada que fomenta el patriarcado.
Sobre la última visión, el colectivo español Sangre Menstrual propone evidenciarla para romper con el tabú, según su manifiesto “Visibilizar la regla para visibilizar el cuerpo como espacio político” con un repetitivo “Me mancho y no me da asco”.
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Estos performances que han venido desarrollando desde hace algunos años, y que han sido censurados, van más allá del caminar con pantalones blancos manchados de sangre, se trata de rescatar la menstruación de una tiranía que la ha estigmatizado por siglos; el período es un flanco más desde el cual la mujer gana autonomía en la conquista continua de su cuerpo.
A todos aquellos que esperabais que rechazáramos indefinidamente nuestro propio cuerpo: Este es el sumo de mis entrañas del que no huyo, una mancha sin límites. [..] No rechazo mi cuerpo, esta es mi naturaleza.
Culturalmente, desde los acontecimientos de antaño hasta los modernos, hemos lidiado con el desprecio hacia nuestro cuerpo. Hace décadas Gloria Steinem exploró el sexismo que hay detrás de este ciclo hormonal y cómo sería si los hombres menstruaran, y dado el patriarcado no devendría en un acontecimiento vergonzoso como en las mujeres, sino uno asociado con valores positivos y hasta sublimes.
Por otro lado, el tratamiento que cada quién da a su menstruación no debería estar sujeta más que a las decisiones que toma una sobre su cuerpo, como en la manera de vestir, como en el tema del aborto o la maternidad, cirugías, tatuajes, etcétera. En este caso, las chicas han decidido no usar tampones o toallas sanitarias, y es válido. ¿Por qué no habría de serlo? Es su cuerpo, y si al respecto alguien se sintiese asqueado u ofendido ¿por qué insisten en que se ha derribado el tabú?