Salir de la cama es algo que la gran mayoría de la veces no deseamos hacer. Enfrentarse a una ardua jornada laboral, viajes con un tráfico espantoso, gente que no queremos ver, etc. nos hace pensar que la mejor idea es taparse hasta la cabeza y quedarse ahí sin moverse, para que nadie nos descubra.
Si eres de los que necesitan litros y litros de café para sentirte vivo, o de los que saludan con un”buen día” cuando en el fondo quieren gritar que odian todo y a todos, puede que estos consejos sean útiles y te sirvan para cambiarles la cara a las mañanas, y si no lo hacen, bueno, por lo menos lo intentaste. Aquí vamos:
- Cambia tu despertador: Creo que es lo más obvio. Si te despiertas con un sonido de alarma que te deja pegado al techo, obviamente tendrás pésimas experiencias al abrir los ojos por la mañana, pero si seleccionas una canción que te guste, podrá ser un momento mucho más relajado y especial. Procura ir cambiando las canciones, ya que si la dejas por mucho tiempo, de todas maneras la terminarás odiando.
- Respira profundo: Siéntate en tu cama y bosteza. Trata de seguir con respiraciones lentas pero profundas para oxigenar cada rincón de tu cuerpo. Si tienes tiempo, puedes probar con la técnica del pranayama. te dejará relajado y, a la vez, lograrás realizar una pequeña meditación, lo que nunca será malo.
- Hazte un pequeño masaje: Esto es algo que hago casi todos los días y que me sirve para despertarme relajada. Consiste en masajear el cuero cabelludo de arriba hacia abajo para hacer que la sangre fluya. Se siente maravilloso y te dejará mucho más despejada.
- Realiza un pequeño trabajo físico: Colocar música mientras te bañas o te vistes y bailar como te de la gana. Hacer abdominales, sentadillas o flexiones de brazos, salir a trotar un par de minutos. Todo lo vale para hacer que tu día comience de buena manera, y aproveches de quemar un par de calorías.
- Bebe agua: Lo ideal son 2 litros, pero nadie te pide que los tomes al mismo instante de despertar. Un vaso de agua en ayunas te servirá para ayudar a eliminar algunas toxinas que tu cuerpo estaba procesando mientras dormías, aumentará tu metabolismo y te dará una piel mucho más sana.
- Salud bucal con aceite: Es bien sabido que el aceite de coco sirve para combatir la gingivitis y para blanquear los dientes. Puedes colocar un poco de este en tu cepillo dental en vez de pasta, además de agregar un poco de bicarbonato de sodio para que este tenga una textura que simule una pasta dentífrica normal. Aunque debes ocupar esta fórmula con moderación, podrás ver tus dientes mucho más blancos y sanos. ¡Inténtalo!
- No te saltes el desayuno: Es la comida más importante del día ya que le das a tu cuerpo los nutrientes que necesita para funcionar durante la jornada. Si agregas diversos súper-alimentos podrás tener energía, sonrisas y felicidad asegurada.
- Cambia tu pasta de dientes: ¿Por qué querrías poner algo en tu boca que dice que debe evitar ser ingerido? Prueba realizando tu propia pasta de dientes. Ayudarás al planeta y te motivarás a dejar de lado las marcas comerciales para realizar tus propios productos de belleza.