A la hora de arreglarnos y ponernos más bonitas, cada una de nosotras tiene la opción de elegir qué le queda mejor o qué le gusta más.
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Hay algunas chicas más sencillas, que con un poco de rubor y máscara de pestañas se sienten atractivas, y otras que disfrutan usar cada uno de sus arsenales de belleza para lucir sexy y atractivas.
La gracia de los artículos de belleza es que están hechos para que nos favorezcan, especialmente para esos días en que no hemos dormido bien o que queremos vernos aún más bonitas para una ocasión especial.
Sólo el hecho de ser mujer nos da ese plus; podemos jugar con la coquetería y maquillarnos como se nos antoje. A pesar de que los hombres cada vez se están preocupando más de cómo lucen, somos las mujeres las reinas de los artículos de belleza y siempre llevaremos ventaja en este sentido.
Analizando el último punto, el que se refiere a los hombres y su creciente preocupación por la belleza y por cómo se ven, también puede ir de la mano con que ahora ellos se sientan con mayor autoridad de opinar sobre cómo nos arreglamos nosotras.
Tomemos o no en cuenta lo que nuestra pareja o amigos opinen sobre cómo nos embellecemos, hay cosas que a veces hacemos y que ellos detestan.
Como todo en la vida, nada es muy blanco o muy negro; hay cosas que algunos hombres pueden odiar y que otros pueden amar, aunque al final, eso no hará que dejemos de arreglarnos como más nos gusta.
Exceso de perfume
Las fragancias y perfumes son un uno de nuestro artículos favoritos y algo que los hombres agradecen. Lo que sí ellos no soportan, es cuando abusamos de ellos y prácticamente, nos bañamos en perfume.
Capas y capas de base
La base de maquillaje es uno de nuestros mejores aliados; nos ayudan a emparejar el color de la piel y a disimular granitos o manchas. A pesar de que a ellos les guste el resultado cuando estamos bien maquilladas, lo que odian es que nos pongamos base como si el mundo se fuera a acabar.
Pestañas postizas
Para las amantes del look Twiggy y las pestañas over sized, les tenemos una mala noticia. Un poco de color en las pestañas hace que nos veamos más coquetas a los ojos de ellos, pero llevar verdaderas alas de mariposa en los nuestros puede ser algo que los irrita.
Brillo de labios pegajoso
Esos que son tan, tan, pero tan pegajosos que hacen que nuestros labios se peguen unos con otros. Los hombres prefieren labios al natural, ¡claro, así es más agradable besarnos!
Excesos de autobronceante
Hay veces en que por querer vernos más bronceadas, se nos pasa un poco la mano y quedamos nada más y nada menos, que como un zapallo. A los chicos les gusta vernos bronceadas, pero como son un poco exigentes (no tendrían por qué) quieren que éste sea natural.
A pesar de todas estas cosas que los hombres odian, si a nosotras nos gusta cómo se ve, ¡hagámoslo de todas formas!