Actualidad

¿Por qué ir de compras es una terapia?

Sin excesos, ir de compras es una buena opción para mejorar tu día.

Para un mal día, hay algunos remedios como cumplirte un antojo, bailar o simplemente quedarte dormida. Algunas mujeres consideran “ir de compras” como algo que las ayuda a levantarse el ánimo. Si eres una de ellas, ¿tienes idea de por qué esto se considera una terapia?

PUBLICIDAD

Veámoslo más allá del consumismo y el impulso irracional por tener algo. Esto tiene que ver con todo lo que tu mente procesa al momento de comprar. Los siguientes puntos explican por qué resulta tan positivo darse una vuelta por las tiendas de vez en cuando.

Visualizas un mejor escenario

Viví con mi ex durante algunos meses, cuando las cosas no funcionaron y nos separamos, inmediatamente empecé a hacer cambios en mi casa. Tardé horas dando vueltas por la tienda, muy concentrada en la cantidad de cosas que se verían lindísimas en mi hogar. Claro, no compré mucho, pero cuando salí de ahí me sentí diferente.

Mientras paseas por los pasillos o aparadores te vas imaginando cómo se vería “eso” en tu casa, o cómo se te vería puesto. Este proceso reduce la ansiedad en niveles importantes en situaciones de cambio. De ahí que casi siempre salgamos con más cosas de las que llevamos en la lista.

El placer incrementa la creatividad

Una amiga que se dedica a la decoración de interiores me cuenta que uno de sus más grandes placeres es entrar a las tiendas y observar cómo están puestos los aparadores, cómo acomodan todo en las tiendas de artículos para el hogar y asegura que las mejores ideas decorativas han sido inspiradas en esto.

Es como cuando vas caminando por una plaza y ves un aparador con el outfit perfecto. Entras a la tienda y ya se te ocurrieron otras 10 ideas para combinar, entonces compras eso que ya te imaginaste y mueres por llegar a tu casa a probártelo.

Relajación y distracción

Cuando le preguntas a las mujeres por qué siguen esta terapia, las respuestas casi siempre serán: para relajarse, entretenerse o desconectarse del mundo.

Eso de desconectars es bastante necesario cuando tienes una decisión importante que tomar; darte unos minutos de distracción le da mayor claridad a tu mente. Funciona como un tipo de vacaciones mentales en las que haces cosas que te causan placer para distraer lo que te está causando angustia.

Comprar nos motiva

De alguna manera, hay gastos que más bien son inversiones. Cuando compramos algo para mejorar lo que sea de nuestra vida, nos da la sensación de que algo estamos haciendo bien. Obviamente sentimos más control y más motivación.

Como ejemplo les pongo el mío, compré un par de pesas y un tapete de yoga para hacer más ejercicio en mi hogar. Era algo que me había estado costando trabajo empezar, pero compré mi kit para motivarme. Inicié inmediatamente.

La terapia de las compras, se trata de encontrarle un beneficio a los gastos que hacemos en ciertos lujos. Todo pierde sentido cuando gastas tu dinero a lo tonto porque vienen los remordimientos después de la compra y eso afecta directamente nuestro estado de ánimo.

Considera esto como una opción que no debe llevarte al consumismo excesivo e innecesario, pero que puede regalarte unas horas para consentirte y sentirte mucho mejor.

Tags

Lo Último