Entre las famosas que se han preocupado por asegurar partes de su cuerpo están Jennifer López, Julia Roberts y Miley Cyrus. Taylor Swift también compró un seguro para sus piernas por 40 millones de dólares y siguiendo la tendencia, ahora quiso estar segura de que nadie usara su nombre para contenidos pornográficos.
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La famosa cantante adquirió dos dominios en la red, TaylorSwift.porn y TaylorSwift.adult, para evitar que se utilicen o asocien contenidos para adultos a su nombre y su marca.
La posibilidad de comprar este tipo de dominios es resultado del trabajo de Icann (Internet Corporation for Assigned Names and Numbers), una asociación que se encarga de expandir Internet con nuevas terminaciones y que también ha dado la posibilidad a distintas personas de comprar dominios que pueden perjudicar su identidad.
Todo esto agilizará las búsquedas en Internet y además, desde el 1 de junio, cualquier persona podrá adquirir dominios según lo requiera. La idea de Taylor Swift es un ejemplo más de lo empoderadas que están las celebridades más jóvenes y del manejo pleno que los famosos quieren tener de su imagen.
Muchas veces nos hemos enterado de casos que relacionan a personas famosas con situaciones o escándalos sexuales, y como una medida extra de protección, Taylor quiso tomar el toro por las astas y evitar posibles futuros malos ratos.
Lo hizo apenas pudo, ya que así se asegura de que los populares trolls de la red no lo hicieran antes que ella y no pudieran hacer uso de su nombre para cualquier tipo de contenido erótico o pornográfico.