Así como los collares o los aros pueden dar un toque original a un atuendo, los zapatos tiene el poder de hacer de un look simple, una verdadera obra de arte. Casi todas las mujeres adoramos los zapatos, y digo casi, porque hay chicas que no se interesan realmente en ellos.
Para las que sí nos enamoramos cada vez que vemos un par de zapatos en una vitrina, es necesario que manejemos algunos datos al respecto, sobre todo de los que tienen un tacón enorme.
Los zapatos con taco han sido un elemento clave en la construcción de los estilos de vestir a través del tiempo. Al contrario de lo que se podría pensar, no siempre se han asociado a la femineidad de la mujer.
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En el Antiguo Egipto, los hombres usaban tacones y era de lo más natural. El rey Luis XIV de Francia era fanático de los zapatos con taco, y de hecho, le pidió a un zapatero un diseño exclusivo para él, por supuesto, con un taco prominente.
En la época moderna y en los tiempos actuales, los tacones se relacionan con la sensualidad y las mujeres en todo el mundo los ocupan para complementarlos con su ropa o también para verse un poco más altas.
A pesar de lo lindos y geniales que son, los zapatos con tacos muy altos pueden ser un problema. Además de lo estéticos, los tacones y su uso continuo pueden ser un gran enemigo para las rodillas, la columna y los músculos.
Un artículo publicado en el sitio de la Sociedad Americana de Osteopatía, revela las consecuencias que nuestro cuerpo puede sufrir tras el uso prolongado de tacos con demasiados centímetros.
Lo peligroso de todo esto, es que los problemas no se manifiestan de inmediato. Esto hace que las mujeres sigan usando tacones sin pensar en que se están haciendo daño, pero cuando empiezan a sentir molestias, es cuando pueden haber problemas más graves.
Los zapatos de taco alto pueden provocar lesiones musculares en las piernas, deformaciones en los dedos de los pies, juanetes y dolor de espalda. Como si fuera poco, los tacos altísimos puede ser los responsables condiciones más preocupantes como la artritis de rodilla y lesiones en el tendón de aquiles.
Para evitar todo esto, es importante que le des un respiro a tus pies. Hay que considerar que al ponernos un par de zapatos altos, estamos alterando la postura natural del cuerpo.
Preocuparse de elegir los zapatos correctos puede quitarte sólo un poco de tiempo, pero al hacerlo, estarás evitando problemas más graves a futuro. Si no puedes dejar los tacos, trata de alternar entre un día u otro. Bájate de ellos un día y súbete otra vez al siguiente, así evitarás dolores y lesiones.