Una mujer contrajo grave infección por una brocha de maquillaje

Es como para no creerlo. Jo Gilchrist, una joven australiana de 27 años estaba con una amiga un día cualquiera y se dio cuenta de que tenía un pequeño granito que le molestaba y que quería tapar. Como un acto natural, le pidió una brocha de maquillaje a su amiga, pero nunca se imaginó lo que ocurriría después.

Después de un momento, Jo se empezó a sentir mal; le dolía mucho la espalda, tanto que ella misma dijo a Daily Mail que:

El dolor era mucho peor que los dolores de parto, pensé que iba a morir.

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La joven fue llevaba al hospital con urgencia y entró en un coma inducido para poder ser operada. Antes de ese momento, Jo no tenía sensibilidad en su cuerpo y esa desagradable sensación la recorría entera.

El veredicto de los médicos fue lapidario: lo que le ocurrió a Jo Gilchrist se debió a una bacteria estafilococo que al entrar en contacto con su columna, la dejó paralizada de la cintura hacia abajo y en una silla de ruedas.

Analizando las causas de por qué podría haber pasado todo esto, y descartando las opciones, Jo y los médicos llegaron a la conclusión de que la bacteria que provocó la infección ingresó por su rostro y que era la brocha de su amiga la que estaba infectada.

Tal como señaló Jo, las mujeres solemos prestarnos maquillajes, brochas y pinceles, sin considerar que algo así podría pasar. Es probable que sabiendo esto, nos preocupemos más de que ponemos en nuestro rostro y de cómo lo cuidamos.