De todas las cosas dolorosas que puede enfrentar una persona en la vida, perder a un hijo debe ser una de las más difíciles de llevar. Aunque aún no he sido madre, imagino lo terrible que debe ser y empatizo con el dolor de cualquiera que haya vivido esta experiencia.
Hay muchas formas de sobrellevar la muerte de un hijo, cada persona experimenta el dolor de forma diferente, y en el caso de este padre, todo ese dolor fue canalizado en una hermosa expresión de amor y arte.
Como él mismo cuenta en un artículo de Bored Panda, Sander Bakker debió enfrentar la muerte de su hijo Nikolaas hace unos meses. Obviamente, estaba devastado y como no podía expresar todo el dolor que sentía con palabras, decidió crear una pequeña lámpara que llamó “Niki Table Lamp”.
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Este proyecto no sólo lo ayudó a lidiar con su dolor, sino que además fue el punto de partida de una campaña para promover la investigación sobre las causas de la hernia diafragmática congénita, enfermedad que le provocó la muerte a su hijo.
Sin palabras, traté de expresar mi amor por mi hijo Nikolaas. Este proyecto no se convirtió en una expresión de dolor, sino que en una celebración de la vida, un recordatorio para que disfrutemos la vida, que puede ser tan frágil.
La idea de Sander es conseguir recursos para investigar esta patología a través de la venta de sus lámparas, pero el motivo de fondo tiene que ver con “entregar una luz que te recuerde disfrutar la vida”, como él mismo escribe en el sitio del proyecto.