Estamos a mitad de año y nuestro cuerpo nos empieza a pedir más y más energía. Luego de todos los esfuerzos que hemos hecho en estos estos meses, el organismo comienza a evidenciar el cansancio y podemos combatirlo con alimentos naturales para recuperarnos.
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Una de las soluciones perfectas para esto es el maqui. Este fruto de color púrpura crece de forma silvestre en el sur de Chile, y aunque es pequeño de tamaño, los beneficios que podemos obtener de su consumo regular son innumerables.
Al igual que el ginseng, el chocolate amargo o el mate, el maqui es muy energizante. Se puede comer como fruta, beberlo como infusión, en polvo o elegir entre las opciones que ofrece el mercado.
Una de las marcas chilenas especialistas en la elaboración de este producto es Luki y Guillaume Pothier, gerente general de tienda, nos explica cómo nos podemos beneficiar con el consumo regular de bebidas con maqui:
Tiene propiedades antiinflamatorias y es un poderoso antioxidante. Fue usado tradicionalmente por los mapuches para aliviar afecciones de la piel. Contiene altas concentraciones de polifenoles, antocianinas y vitamina C, lo que ayuda a prevenir el cáncer y retardar el envejecimiento prematuro de las células.
Además de todo esto, el maqui puede ayudar a la pérdida de peso. Al ser analgésico y antiinflamatorio, esta pequeña fruta facilita la regulación del metabolismo y promueve la termogénesis, acción que contribuye a la eliminación de grasas.
Si se quiere mezclar con otros alimentos, como yogur, avena o batidos de fruta, también existe el maqui orgánico en polvo (Isla Natura). Si se quiere dar más versatilidad aún al producto, se puede incluir en smoothies energizantes que te mantendrán activa y concentrada.