¿Te gusta el sexo? ¿Te sientes culpable de admitirlo? Error número uno: la culpabilidad autoimpuesta es una de las razones que hacen que tengas una visión errada de las relaciones sexuales y todo lo que eso involucra.
¿Por qué tendrías que sentirte culpable? La sociedad tiene mucho que ver en ese sentido. En vez de aceptar que el sexo es algo bueno y natural, lo demonizamos, lo catalogamos de algo secreto.
“No es de señorita tener sexo con muchos hombres”. Primer concepto que tenemos que eliminar de nuestras cabezas. Si quieres tener sexo, protégete y házlo. Nadie te puede catalogar de nada porque disfrutes de las relaciones sexuales.
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Es una idea demasiado retrógrada como para que la sigamos validando. Es cierto que hay que preocuparse de la salud y cuidarse de las enfermedades de transmisión sexual, pero todo lo demás queda a tu propio criterio.
¿Qué hay de la masturbación femenina? Al igual que el sexo, la masturbación es sana y necesaria. Tienes las herramientas para sentirte bien y experimentar placer, ¿por qué las ignoras?
No estás obligada a masturbarte, pero si lo haces y lo disfrutas, no lo escondas. Si tus amigas no hablan de ello, tú puedes ponerlo como tema de conversación. Todo se trata de tocar estos temas con naturalidad.
El sexo no es sinónimo de perversión, son cosas distintas. Es cierto que hay personas que actúan pervertidamente, pero eso no quiere decir que todo el mundo sea de esa forma.
El sexo es de las mejores cosas que hay en la vida, aprovecha y disfruta, sin culpas, arrepentimientos o prejuicios. Al fin y al cabo, esa culpabilidad sólo te llevará a interpretar el sexo de manera equivocada.