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Cosas que hubiera querido saber a mis 17 años

A mis 17 pensaba que las cosas llegarían por sí solas, pero con el tiempo aprendí que si no me levanto a trabajar por ellas, simplemente no suceden

No fue hace mucho que era una chiquilla que andaba corriendo por los pasillos de su colegio con sus tres mejores amigas mientras sonaba una canción de tropipop en el último modelo de Blackberry. Tampoco fue hace mucho cuando tenía 17 y quería comerme al mundo de un solo bocado.

Hay muchas cosas que hice bien y otro montón que hice mal, y aunque no me arrepiento, porque solo de esa manera pude convertirme en quien soy ahora, hay algunos consejos que me hubiera gustado saber a esa edad.

  1. Querer es poder: Sí, la típica frase de libro motivacional se hace realidad. A mis 17 pensaba que las cosas llegarían por sí solas mientras yo las esperaba en mi pupitre de bachillerato, pero con el tiempo aprendí que si no me levanto a trabajar por ellas, simplemente no suceden.

  2. Las relaciones públicas lo son TODO: Descubrí esto años después porque estudio la carrera de Comunicaciones, pero me hubiera encantado saber que ser educada, responder a tiempo, tener una sonrisa en mi rostro y hacer sentir a todos especiales era la clave para sentirme bien y poder transmitir esa energía a todos los que me rodeaban.

  3. Los patanes existen, y la edad no significa nada: No hay mucha diferencia entre uno de 18 años y uno de 25, y saber esto tiempo atrás me hubiera librado de hacerme ilusiones,  imaginarme una boda en la playa y hasta los nombres de nuestros hijas, Soleil y Olivia.

  4. Mamá es la mejor confidente y papá el mejor consejero: En esos años se me hacía difícil contarle todo a ella y cada consejo de él pensaba que era un regaño, pero ahora me doy cuenta que ellos son sabios y que simplemente quieren lo mejor para mí, aunque todavía siga siendo terca.

  5. El bueno es el mejor: Todas tenemos esa atracción por los chicos malos, pero con las lecciones he aprendido que es mejor el chico bueno, ese que te hace sentir segura y como una princesa.

La vida es un constante proceso de aprender, caer y levantarse, y eso es lo que la hace e emocionante. Cada situación, ya sea buena o mala, sirve para cambiarte e inspirarte a ser mejor y dar lo mejor de ti.

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Quizás en 5 años pueda volver a escribir este post, con otras lecciones más que hayan huella en mí.

¿Cuáles han sido las de ustedes?

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