Frases sobre el viernes que las “viejas de alma” siempre repiten

¿Se han fijado que hay gente joven que se comporta como anciano? Una vez leí en Internet que según el budismo y la teoría de la reencarnación, todas las almas pasan por distintas etapas o edades (son siete en total) y que para tener un alma madura, hay que vivir mucho; nacer y morir hasta que tienes la sabiduría para volver a unirte a la energía del universo.

Cuando leí esto y las características de las personas según cada edad del alma, hay muchas cosas que me hicieron sentido. Obviamente, no todos creen en ello y es válido, pero al menos para mí, fue lógico pensar que esa puede ser la explicación a esos niños que se comportan como adultos y a esos ancianos que parece que nunca envejecieran interiormente.

Como este tema es muy interesante y da para un nuevo post, ahora vamos a hablar de cosas más “livianitas”. Todas tenemos amigas (me incluyo ahí) que pareciera que tienen 50 años más que su edad real. Yo las llamo “viejas de alma” y son de esas que a partir de cierta edad, suelen repetir el mismo discurso todos los viernes.

Recomendados

¿Cómo explotar tu sensualidad si eres mamá o estás metida en el arquetipo de la madre?

¿Por qué la Generación Z es menos feliz al resto? Nuevo estudio muestra una preocupante situación

Un evento solidario que promueve la vida saludable y apoya la lucha contra las adicciones

“Es viernes y mi cuerpo no lo sabe”

Es de las que más me ha tocado escuchar últimamente y yo también la uso porque me da risa. Surgió de un meme que decía que “es viernes y mi cuerpo lo sabe”, pero para las viejas de alma es al revés. En el fondo, quieren salir y ser jóvenes, pero la idea de llegar a acostarse es superior a todo.

“El viernes es para descansar, el sábado siempre hay mejores panoramas”

Saben que las cosas más entretenidas son los viernes, pero para consolarse a sí mismas y no admitir que son ancianas precoces, dicen que el viernes no es para salir.

“No sé cómo lo hacía antes, tenía tanta energía”

Recuerdan esos años en que tenían ganas de salir siempre, incluso si habían dormido dos horas estudiando para una prueba de la universidad. En teoría, la energía todavía está ahí, pero como se trabaja hasta tan tarde y es agotador, hay que aprovechar el fin de semana para descansar (totalmente de acuerdo).

“Cuando estaba en la universidad me lo carretié todo, ahora tengo derecho a viernes de Netflix si quiero”

Obvio que tienes derecho y bueno, cómo no caer en las redes del estúpido y sensual Netflix.