Esta marca que diseña trajes de novia y de fiesta lanzó recientemente una nueva colección que quiere definir lo espacial como tendencia para las novias que se casarán en la temporada Primavera 2017.
Con Don O’Neill encargado de la dirección creativa, los diseños están inspirados en una especie de fantasía con tintes que recuerdan un poco al estilo del icónico David Bowie.
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La propuesta incluyó vestidos blancos que pueden calzar en lo más tradicional, pero la mayoría agregaban un elemento futurista, como figuras geométricas, bastante parecidas a las que suele incluir Balmain, aplicaciones de plástico transparente, tonos plateados y tocados para el cabello acompañados de figuras que “mantenían en órbita” a las modelos.
Quizás, para las más conservadoras, la propuesta de esta marca es demasiado conceptual, pero hace tiempo que los diseñadores comenzaron a exhibir alternativas distintas para las novias, que no sólo se rigen a un velo y encaje blanco.
Tal como afirma Irina Grechko en su artículo en Nylon, Don O’Neill salió completamente de su zona de confort para hacer algo diferente, que puede que las mujeres odien o amen, pero de eso se trata, de atreverse.
A nuestro parecer, su propuesta es fresca y eso siempre se agradece. Las hechuras revelan siluetas que favorecen, aunque sí o sí hay que tener bastante personalidad para usar algunos de los vestidos de esta colección.