El desafío de aprender a meditar cuando eres demasiado ansiosa

Llegó el día: hoy vas a empezar a meditar. Tus amigas y cercanos que lo practican te dicen que debes probarlo porque a ellos les ha traído muchos beneficios, y como tú los notas, ¿por qué no intentarlo?

La meditación es mucho más simple de lo que pensamos. No esperes tener iluminaciones divinas o ver luces de colores; no es necesario experimentarlo para saber que lo estás haciendo bien.

También es bastante personal. Hay algunas personas que siguen ciertos métodos, otros son autodidactas o también están los que lo convierten en un nuevo estilo de vida, una apertura a la consciencia que hace despertar bloqueos y liberar nuestra verdadera identidad.

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Si hay algo en lo que podemos convenir, es que para las personas ansiosas, meditar puede ser un gran desafío. Irónicamente, son los que más se verán beneficiados de esta práctica, porque al enfocarse en el aquí y ahora, podrán aprender a no estar ansiosos por lo que pasó o pasará.

Es despojarse de la necesidad de control y dejar ir, sólo estar y con la práctica de meditaciones diarias vas a convivir más armoniosamente con lo que te preocupa. Si lo piensas, la preocupación no sirve de nada: no cambia pasado, presente o futuro, sólo te hace estar en un estado desagradable.

No hay que callar la mente: escucha tus pensamientos y déjalos ir

Es cierto que algunas corrientes de meditación tienen como objetivo callar a la mente y dejarla “en blanco”, pero hasta pensar en eso es demasiado estresante para las personas ansiosas.

Quizás, es bueno partir desde otra premisa: no presionarse por callar la mente, sino que saber que esos pensamientos están, aceptarlos y dejarlos ir. Si no los conservas, no se convierten en una representación de lo que eres, no son tu esencia.

No juzgues lo que piensas y tampoco te culpes; trátate a ti misma con compasión y guíate cuando sientas que estás dando vueltas en un tema en especifico. Vuelve al presente y acéptalo sin prejuicios.

Meditar no tiene que ver con hacerlo bien o mal, se trata de hacer algo para mejorar tu vida y si lo estás intentando, ya tienes una parte importante del camino recorrido.