Actualidad

Irse a vivir con un familiar no es la opción

Sin duda una idea que tuvieron antes los afectados por una necesidad irrestricta de vivienda, pero no es aceptable que el gobierno lo entregue como alternativa.

Esta mañana el presidente de Chile, Sebastián Piñera, declaró que “no va a ser posible que todas las familias que actualmente están en aldeas reciban su vivienda definitiva antes que se inicie el próximo invierno”, como lo había prometido.

PUBLICIDAD

Sin embargo, al gobierno se le ocurrió una “gran idea” que ha sido ampliamente criticada en las redes sociales por ser otro parche más al problema y no una opción real para los damnificados del terremoto y tsunami que afectó a varias regiones del país el 27F. “Hemos decidido diseñar un nuevo programa: dar una vivienda o irse a vivir con un familiar aportando el subsidio de arriendo”.

Sin duda una idea que tuvieron antes los afectados por una necesidad irrestricta de vivienda, pero no es aceptable que el gobierno lo entregue como alternativa.

Recomendados:

Han sido tantas las críticas que apareció el Ministro de Vivienda, Rodrigo Pérez, para rechazar que esa situación fuese la tónica del programa. Descartando que exista uno nuevo enfocado solo en esa idea. “el bono entregado a familias damnificadas tras el terremoto para el arriendo de inmuebles podrá ser utilizado para -en casos excepcionales- cohabitar con familiares a través de contratos notariales, esto con la finalidad de que permanezcan en ellas este invierno mientras les son entregadas las viviendas definitivas”, informó radio Bio Bio.

Sin embargo, eso no fue lo que el presidente informó a los damnificados y las críticas no se hicieron esperar. Si desde el principio hubiesen sido sinceros y no hubiesen inflado los números no tendrían tantos problemas ya que muchos sabrían que probablemente no tendrían sus casas este año.

La verdad es que vivir en la casa de un familiar no es lo mejor debido a las incomodidades y los roces de convivencia que esto genera. Acá el problema es la incompetencia del gobierno por no cumplir sus promesas y dedicarse a vender humo.

A mediados del año pasado Red Mujer y Hábitat de América Latina, apoyado por la organización ONU Mujeres, lanzaron un estudio sobre las situaciones de violencia que viven las mujeres afectadas por el terremoto. El libro se llama “Construyendo ciudades seguras” y según publicó hace un tiempo The Clinic la arquitecta Marisol Saborido -investigadora de Corporación SUR que trabajó para este proyecto en las regiones del Maule y Biobío- comentó que estos hechos de violencia serían los siguientes:

a) La violencia de los espacios (hacinamiento en las aldeas)

b) La violencia respecto de la incertidumbre y las expectativas que cada familia tiene sobre la posibilidad de volver a tener una vivienda.

c) La violencia en la demolición de sus viviendas, acto en que no se comprende, ni reconoce, el dolor de la pérdida.

d) La violencia de ser objetos de la especulación inmobiliaria.

e) La violencia de recibir montos extremadamente bajos de subsidios para la reparación que están lejos de dar cuenta del sacrificio que cada familia hizo para alcanzar el sueño de la casa propia.

Tags


Lo Último