Paddy, inglesa, tenía 78 años cuando decidió irse a vivir a España con su esposo, pero él murió un año y medio después. Si ustedes creen que a esa edad ya no te queda nada, y lo lógico era volver con sus hijos, ella no: decidió retomar su pasión por el baile, que había abandonado al casarse. Así fue como encontró a Nico, su instructor de baile y compañero de rutina.
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¿Son lo suficientemente buenos para inscribirse en Britain’s Got Talent? Es evidente que las reacciones de los jurados están un poco ensayadas, por lo menos al principio, cuando Paddy y Nico comenzaron su rutina con unos pasos de tango y todos parecen aburridos. Pero lo que comienza como un episodio de Black Mirror en pocos segundos deja muy mal a Dirty Dancing.
Si no me creen sólo miren el video y comprenderán por qué la jurado Amanda Holden oprimió el botón dorado, que les da derecho a pasar a semifinales sin pasar por el proceso de selección. No tiene subtítulos pero no son necesarios, ya verán.
¿Qué tal? Seguramente se quedaron igual que yo, con la boca abierta. Como dice Nico al final, si ella puede, todos podemos, ¿qué tienes ganas de lograr?
Fuente: Splendid Mind