Hay mujeres que por genética o factores hereditarios nacen con más pelo que otras, y eso no es problema hasta que se llega a la temida pubertad. Es una etapa que todas experimentamos pero que, para algunas, es sinónimo de burlas.
PUBLICIDAD
Los adolescentes son crueles y si ven a una niña un poco más peluda que otra, lo más probable es que le hagan notar su defecto, y esto sin duda afectará la autoestima y seguridad de ella.
Apenas estamos en edad para depilarnos, lo hacemos. Hay algunas chicas que no lo necesitan con urgencia, pero otras ven esto como una oportunidad para librarse de esos pelos tan odiados.
Recomendados
20 nombres franceses bonitos para niña y niño con su significado: todos suenan bien en español
Espacios inclusivos para un futuro sostenible: el papel crucial de la diversidad en las empresas
15 nombres de niña que empiezan con “A”: todos son bonitos y esconden un profundo significado
El problema comienza cuando algunas mujeres comienzan a obsesionarse por la depilación, y uno de los sectores que más ataca la pinza o la cera depiladora son las cejas.
No tiene nada de malo perfilarlas y quitar esos pelos de más que hacen que la mirada no se destaque tanto como debería, pero depilarlas en exceso puede, incluso, convertirse en una obsesión.
La página Cosmpolitan aborda este tema en un artículo publicado ayer y habla sobre los síntomas que tiene una mujer obsesionada por depilarse las cejas:
Depilarse las cejas en exceso es un síntoma de la tricotilomanía; la obsesión aquí es en relación a las cejas y no al cabello del resto del cuerpo. Las chicas que lo hacen, es porque probablemente, pasaron experiencias humillantes por tener unas cejas un poco más frondosas cuando niñas.
Muchas veces, producto de burlas y humillaciones llegamos a extremos poco sanos y nos hacemos más mal aún. Si somos un poco más tolerantes y aceptamos a los demás tal como son, podríamos evitar que personas sufrieran en vano.